lunes, agosto 10, 2015

Marc Márquez dueño de Indianápolis. Por Mario Diez.

INDIANÁPOLIS
Marc Márquez establece hitos históricos. Al vencer en el GP de Indianápolis logró su quinto triunfo consecutivo en este célebre trazado denominado ‘La Capital Mundial de la Competición’: tres en MotoGP™ y dos en Moto2™. En los tres últimos años ha marcado la pole position y ganado la carrera. Durante casi toda la competencia persiguió –en un duelo de máxima tensión- al puntero Jorge Lorenzo hasta que a tres giros del final lo superó. Otro duelo fue el de Dani Pedrosa y Valentino Rossi por el tercer lugar, peleado al extremo se definió en la última vuelta a favor del italiano. En Indianápolis, aquellos ‘Cuatro Fantásticos’ de otros tiempos regresaron para dar un espectáculo asombroso como apasionante: entregaron el cien por cien, pilotos y máquinas.
“Esperar”: la verdadera estrategia de Márquez. Es sin duda otro Márquez. No es el de Argentina. Ni el de Mugello o Catalunya. Es el de Austin, el de Alemania y que ahora logra su segundo triunfoconsecutivo volviendo a mostrar sus cualidades de todopoderoso. Le ganó de manera limpia e inapelable a su máximo rival, Jorge Lorenzo, uno que también se las trae, porque las veinticuatro vueltas que tuvo que soportar llevando agotadoramente por detrás a Márquez son una demostración de ese piloto que bien puede ser definido como el piloto perfecto –gane o no-, basta ver las tomas de la televisión desde el helicóptero, para apreciar cómo Lorenzo hacía radios perfectos según su conveniencia a un ritmo infernal sin cometer ningún error, donde pareciera que hubiera anestesiado aquel lugar mental donde la presión de sentirse perseguido en la pista lleva a perder el rumbo o la presión de más de 67 mil espectadores y de millones de televidentes que desean sin tener ninguna piedad que el espectáculo se defina, poniéndole un punto al interrogante sobre sí Márquez podía superarlo a Lorenzo y qué pasaría después.
Durante muchos giros, Marc Márquez se preguntó cuál sería el mejor momento para atacar. Un dato exacto lo fue guiando para saber lo que tenía que hacer: el ritmo de carrera de uno y de otro.“Lorenzo fue muy parejo y fuerte durante toda la carrera, casi al límite”, reflexionó Marc ante los periodistas, “así que tomé la decisión de esperar hasta el final porque no había ninguna chance de abrir una diferencia”.
Antes de que Márquez se jugara por el sobrepaso, en la vuelta veintitrés, los dos gladiadores mostraron la mejor performance de la Honda RC213V y de la Yamaha YZR M1. En ese giro 23, Márquez estableció el record de vuelta en carrera:1.32.625 y Lorenzo su mejor vuelta personal: 1’32.652. La diferencia entre ambas máquinas era mínima: 0.027. Con ese panorama, en el comienzo de la vuelta 25 y con el envión de la recta principal, Márquez se jugó su destino en la primera curva de Indianápolis. Al final de ese giro la tuvo difícil, Lorenzo y la Yamaha #99 buscaban revancha, pasaron separados por 0.017, en el siguiente la tensión se mantenía al máximo, cruzaron con una diferencia de 0.076, recién en la 26 pudo respirar a medias: los separaban 0.173 y en la bandera fue con relativa holgura: 0.688, una distancia mínima si se tiene en cuenta que, el año pasado el catalán, le ganó al mallorquín, esta misma competencia por 1.863.
Este triunfo a lo Márquez está adornado por los antecedentes: cinco triunfos consecutivos en Indianápolis (tres en MotoGP™ y dos en Moto2™), siguiendo la línea de la última en Sachsenring, donde también tiene un historial de triunfos consecutivos en distintas categorías: seis. Donde hay similitudes: repite la performance de 1-1 de pole-carrera, repite el record de vuelta en carrera y hay un cambio fundamental de actitud: le ganó de manera limpia, sin discusión, sin reclamos. No hubo roces, ni golpes de carenados. Lo extraordinario de Márquez, no fue en la calidad del sobrepaso, al que podríamos denominar clásico, sino en haber incluido la paciencia en su estrategia.
Algo pudo haber empañado este espectáculo. Y ellos mismos contaron –al término de la carrera- qué hicieron con sus respectivas motos después del warm up, porque ambos tuvieron un susto: una caída. Lorenzo dañó mucho el chasis de la M1. “Así que usé mi moto N°2”, contó el mallorquín. “Corrí con mi moto principal porque no estaba tan golpeada”, reveló Márquez.
La foja de servicios de Marc Márquez, Bi Campeón, vuelve a engrosarse: tercer triunfo del 2015, segundo consecutivo; triunfo 22 en MotoGP sobre un total de 46 competencias. ¡Un promedio de casi una victoria cada dos carreras en el término de dos temporadas y medias!
Y el accionar de Márquez permitió que Honda alcanzara las 700 victorias en el Mundial de Motos. Un rato antes, en una complicada carrera de Moto3™, había vencido el belga Livio Loi con una Honda del equipo RW Racing GP. Márquez redondeó para las estadísticas. Por eso, Shuhei Nakamoto subió al podio de MotoGP con remera conmemorativa.
“Pudo haber sido peor y pudo haber sido mejor”, dijo casi como un filósofo Jorge Lorenzo, quien lideró 24 de las 27 del GP de Indianápolis, “un segundo puesto final siempre es bueno, más teniendo en cuenta que aquí están los mejores pilotos del mundo”. Lorenzo explicó por qué no tuvo una respuesta exitosa ante el sobrepaso de Márquez, “es posible que no haya tenido la energía suficiente para responder”. El mallorquín valoró que, “Resté cuatro puntos en la diferencia con Valentino (195 a 186) y perdí cinco con respecto a Marc (186 a 139), pero él está lejos todavía”. Para concluir expresó: “Deberíamos festejar este resultado en un fin de semana difícil”. Massimo Meregalli, Director del equipo oficial Yamaha, agregaba: “No le podemos pedir nada más a Jorge, que ha liderado el noventa por ciento de la competencia en un trazado que no nos favorece. Lo importante es el doble podio”. Lorenzo segundo, Valentino tercero.
La inagotable magia de Valentino. ¿Cómo se puede explicar lo que hace Valentino Rossi en carrera? Es la cuarta vez en el 2015 que larga desde el octavo lugar, un puesto sin duda muy desfavorable, para haber ganado en dos oportunidades (Qatar y Argentina) y haber finalizado en tercera ubicación en otras dos oportunidades (Italia y ahora Indianápolis). Parte de la explicación son las excelentes largadas, en otros casos son las mejoras que logra en su Yamaha para hacerla competitiva en carrera y también hay que contar la recuperación de mitad de carrera en adelante.
En Indianápolis, ya en la segunda vuelta estaba cuarto a 2.2 segundos del líder Lorenzo y a 1.2 segundos del tercero Dani Pedrosa. Recién en el giro 12, pudo achicar la brecha con el catalán de la Honda #26 y alcanzarlo para superarlo en la 18, pero tres giros más adelante Pedrosa dio signos de estar en condiciones de pelear y lo intentó en un ida y vuelta, hasta que en la 26 fue al ataque y entraron a la última al todo o nada. ¿De dónde sacó Valentino fuerzas y moto para recuperar el puesto del podio en la última vuelta?
“En un momento Jorge estaba primero y yo cuarto”, recordó The Doctor, “así que en esa situación estaba perdiendo 12 puntos, así que me jugué al máximo porque los puntos de tercero eran más importantes para mí que para Dani. No fue fácil porque esta pista con esta temperatura y humedad se torna complicada”, completó Rossi, tercero a 5.966, quien tiene en claro que debe trabajar mucho para lograr una mejor clasificación.
Por su parte Dani, cuarto a 6.147, señaló: “Hemos tenido que luchar bastante con la moto porque faltaba agarre. La sorpresa ha sido Valentino. Sabía que mi ritmo era un poco inferior al de Marc y Jorge, pero después de los entrenamientos pensaba que podría estar un poco más cerca. En el final no pudo devolverle a Valentino la pasada”.
El ataque final le valió a Valentino mantener un liderazgo que viene desde la primera en Qatar y marcar un récord personal –de esta temporada- de diez podios en igual cantidad de carreras: tres victorias, dos segundos y cinco terceros.
Iannone 5to, Smith 6to. Si Indianápolis vio al mejor Márquez, al mejor Lorenzo, al mejor Valentino y al mejor Pedrosa en pista hay que darles crédito a dos pilotos que finalizaron en el quinto y sexto lugar a 21.528 y 21.751 respectivamente. Ellos son Andrea Iannone y Bradley Smith, cuarto con 129 puntos y quinto con 97. Iannone es ya la referencia de Ducati y Smith está mostrando una mejor performance que su compañero Pol Espargaró.
la próxima carrera En una semana más, el 16 de agosto, el undécimo round de MotoGP en Brno, sede del GP de República Checa.

mario diez